Hiperactividad

Tengo un sistema fantástico para recuperarme de los disgustos, es simple y efectivo, mantiene la mente distraída, aportando vitalidad y energía, es baratísimo y me ayuda a organizar la vida, este sistema es "la hiperactividad", nunca me falla y realmente os lo recomiendo, porque además tiene compensación a la postre, he barnizado el suelo, he pintado el techo del cuarto de baño de un tono alegrote, las escaleras de la casa y el hall.

En pocos días estoy renovando el aspecto de esta casa que comparto con mis hijos en Sevilla, aparte de mover y organizar tantos y tan puñeteros papeles administrativos que conlleva la desaparición de una persona (mi hermano también vivía en Sevilla).

Esta actividad es bastante corriente en mi carácter, pero en en estos días en que mi mente me traiciona con dolor, lo combato con mucho más trabajo.

Soy bricolajera, y como manejo con pericia todos los archisperres del mundo artesanal, solo le tengo que imprimir velocidad al rodillo para que el efecto renovador de lo que me rodea sea más inmediato y actúe en mi ser por puro mimetismo, provocandome una satisfacción inmediata, eso si acabo agotada estos días, pero también es bueno para mi porque ese cansancio me ayuda a conciliar el sueño rápidamente y no pensar tanto.

Os parecerá mentira pero es así, no podéis imaginar lo que la decoración y un simple cambio de color logra en algunas personas ( en mi también), será por eso que siempre estoy cambiando el aspecto de las cosas, renovación, renovarse, cambiar, ayudarse.