Un extraño poema de Amos Oz que me gusta.
Dita en voz baja
Mi mano en el heno de tu pecho envejecido
recoge paja
para hacernos un nido
* * * * *
Pero Albert la detiene:
Su mano suave en el heno de mi pecho. Sobre su mano
mi mano arrugada. Ella con mi soledad. Yo con su soledad.
En el porche. De pie. El mar quita el mar
da. Una fina silueta y una pequeña sombra. Una sombra
arrepentida. Se gira. Huye. El mar da el mar
quita.
3 comentarios:
Extraño, pero certero.
Anda, pues a mí también me gusta! Vaya ritmito!
Oye, y la obra del día 1, ya la terminaste?
Un besito, Mojadopapel.
Muaccc
Hola Donce,guapetona,todavía estoy en ello y hasta que no llegue el día 1 no descansaré...día 1 Jueves,creo que este finde me voy a relajar, lo necesito.
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