Diarios Miedos

El Viernes en Notesalves Marino Gonzalez Montero presentó su libro Diarios Miedos, original por la estructura dicotómica de éste, y valiente por su temática, enfrentandose a nuestros miedos más cotidianos y profundos.
Luis Felipe Comendador hizo una introducción al autor, Marino nos leyó algunos de los cuentos y me agradaron mucho por su alto contenido poético, terminó el acto con un monologo drámatico fantástico a cargo de Francis Quirós ,actor extremeño, que nos encantó a todos los presentes.

Marino cae bien simplemente por la naturalidad de sus modos, su mirada transparente y por ese gracejo que tienen los extremeños en su habla, para mi, tan cercana, por ser también la de mi madre.

Todavía no he leido el libro pero os dejo un comentario de Esther Muntañola sobre él, que merece la pena.

Diarios Miedos. Cómo me gusta este título. Toda escritura en Marino González es ya sugerencia desde su inicio. Sugerencia, perturbación, temblor. Aquello que debería atravesar toda Literatura.

Narraciones breves/cuentos /poemas, no es fácil poner etiquetas a la obra de este autor, ni siquiera cuando nos encontramos ante un libro en el que el propio escritor dice presentarnos cuentos: "cuentos de miedo" y "cuentos del miedo". La utilización que hace del lenguaje está tan matizada, se enraiza tanto en cada narración, que hace merecer la relectura para saborear aún más ese regusto a verdad que deja en las palabras. Y desde luego, la Poesía como piel para cada una de esas pequeñas piezas, incluso en las más "ásperas".

Es muy interesante la inquietud, la variedad de emociones y tipos que nos presenta Marino González, el desequilibrio emocional, la locura, la paz, el amor, aquella última piedra a la que agarrarse, la memoria. Literatura del desasosiego. Pero también de la ternura, de la intimidad y la ironía. Un libro que tiñe por dentro, que te hace parar, que quita el polvo al idioma y le confiere intensidad y timbre. Enhorabuena.

Diarios Miedos. Marino González Montero. Ed. de la luna libros. Mérida, 2009.

Por mi parte os transcribo un cuento que me gustó especialmente.

MARTINETE DE LA LOCURA

Te he puesto nombre para acostumbrarme a ti. No encuentro otro nombre de vencerte. Darle un nombre a las cosas es una forma de que se mueran un poco. La palabra -torpe en mi caso- se agarra con las uñas pero no sujeta. Si te llamo soledad y me quedo contigo, se escapan resbalosas todas las otras soledades. Si te digo verde, se derriten todos los verdes menos uno.

Cómo no temerte si sólo te veo en los espejos.
En la parte de atrás, con un buril he grabado tu nombre. Por ver si de esa manera borraba tu imagen. ARUCOL,ARUCOL,ARUCOL......coronando tu sombra. Junto a una risa de bobo y miedo dentro de mi boca.

Me he subido a la azotea huyendo de tu aliento.Todo ha sido en vano. Allí estabais tú y la luna. Asomada a tus ojos crecientes. Como para cortarlos en dos. Un trozo para ti. Otro para mí. Luego te he contado que yo he visto una luna nochenda. Y te has reído con ganas. Y la luna se ha puesto amarilla. Como si le diera verguenza. Y me he bajado otra vez a mi cuarto. Incapaz de contar este cielo. Este cielo que me trae las tormentas.
Bajo la cama he sentido tu respiración. Se llenan de vaho los interruptores.Rendido en la cama y mirando hacia el techo, cuando ha llegado la luz,tu nombre allí arriba pintado: Arucol con rojo de Siena. Cayendo y aplastando mi cuerpo.