Algunos silencios nos exilian
de la tierra prometida.
Muerden mucho más que palabras,
condenan a una perpetua cadena
de más silencios, que atan
un enjambre de palabras
que habíamos presentido
serían dichas.
Enredan algunos silencios
los pensamientos dormidos
y hacen galopar los miedos
que silenciamos.
Sienten los silencios
el éxtasis que asoma
a los ojos del ser
que arrobado susurra
sus más hondos deseos
y es así, sin saberlo,
el silencio que sella
la más firme alianza
de los silentes.
3 comentarios:
Veo que has recuperado el ritmo de entradas. A toda mecha...!
No es el silencio el que me aísla
No es la soledad la que me da miedo
Es mi mente
Sienténdose libre en el silencio
Se desboca e invade mi ser
Afloran pensamientos fríos
Aparecen ideas ácidas
Que corroen las entrañas
Aprovechándose del silencio
El silencio es la prueba de fuego de una vida.
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